Sistema de indicadores ODS en la Oficina de Acción Humanitaria de la AECID

El sistema de indicadores ODS que se viene aplicando en mi ámbito de trabajo, es decir, el sistema que se aplica dentro de la Oficina de Acción Humanitaria (OAH) de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) se basa en es esta publicación: La Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible y la Acción Humanitaria. Un documento elaborado por  el Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH) en Enero de 2019. 

De acuerdo con este estudio, para que los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) sean multidimensionales, integrales y "no dejen a nadie atrás" necesitan a la acción humanitaria dentro de sus principales líneas. Por ello, el texto propone un análisis de cómo se ha incorporado la dimensión humanitaria en la definición de los objetivos y metas que componen la Agenda 2030. 

Le revisión y análisis de las 169 metas en las que se desagregan los 17 ODS permiten hablar de tres niveles de metas:

NIVEL 1: Metas con mayor incorporación de la dimensión humanitaria.

Hay un conjunto de metas en las que existe un importante avance, puesto que están formuladas de manera más específica y explícita, haciendo hincapié a cuestiones relativas a situaciones y contextos de emergencia humanitaria (ODS 1, 3, 11, 13 y 16).

La dimensión humanitaria en la Agenda 2030 muestra avances fundamentalmente en dos ámbitos concretos: 

• ODS 11, dedicado a la conformación de ciudades y comunidades sostenibles. Dentro de este objetivo se recogen metas relativas a la mejora de la resiliencia y la gestión de desastres en los asentamientos humanos. Precisamente, aquí es donde se recogen algunos de los indicadores ya asumidos por Naciones Unidas para dar seguimiento a los ODS, como: 
• Número de personas muertas, desaparecidas y afectadas directamente atribuido a desastres por cada 100.000 habitantes.
• Pérdidas económicas directas atribuidas a los desastres en relación con el producto interno bruto (PIB) mundial. 
• Número de países que adoptan y aplican estrategias nacionales de reducción del riesgo de desastres en consonancia con el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030.
• Proporción de gobiernos locales que adoptan y aplican estrategias locales de reducción del riesgo de desastres en consonancia con las estrategias nacionales de reducción del riesgo de desastres.
• ODS 16, particularmente en su componente dedicado a la conformación de sociedades pacíficas tiene una serie de indicadores definidos y acordados en sus metas:
• Número de víctimas de homicidios intencionales por cada 100.000 habitantes, desglosado por sexo y edad. 
• Muertes relacionadas con conflictos por cada 100.000 habitantes, desglosadas por sexo, edad y causa. 
• Proporción de la población que ha sufrido violencia física, psicológica o sexual en los últimos 12 meses.

NIVEL 2: Metas que en su formulación se vinculan más difusamente a la acción humanitaria. 

Dentro de los ODS y metas incluidas en este segundo grupo, se deberían precisar, reforzar y profundizar las relaciones que existen entre su logro y los ámbitos de acción humanitaria con los que se relaciona, trascendiendo la mera alusión a “situaciones de vulnerabilidad”.

NIVEL 3: Metas con las principales carencias en la incorporación de la perspectiva humanitaria en su formulación.

Las principales carencias y debilidades que enmarcan la ausencia de perspectiva humanitaria en determinadas metas y que necesitan incorporar la atención específica a estos contextos, se dividen en tres grandes ámbitos:

1. La especial atención que van a requerir las situaciones de conflicto o emergencia prolongadas en el tiempo (ODS 3, 4, 6, 7, 8, 11 y 12).
2. El tratamiento específico a las situaciones de emergencia humanitaria en aquellos ODS dedicados a la reducción de las desigualdades, como son los ODS 5 y 10.
3. La atención específica a la acción humanitaria en lo que se refiere al ODS 17, dedicado a la conformación de alianzas y cambios sistémicos para el logro de los ODS. 

Como conclusión, podríamos decir que la Agenda 2030 es un elemento facilitador, que proporciona  cobertura estratégica a este tipo de procesos y ofrece un marco de trabajo a partir del que identificar las interdependencias y capitalizar las sinergias existentes entre acción humanitaria y ODS. 

Por último, el documento señala que la Agenda Humanitaria, refiriéndose sobre todo a conflictos armados, no incorpora de forma idónea las responsabilidades de los y las combatientes, incluidos los Estados, la protección de las personas afectadas por los mismos o la prevención de éstas situaciones.